martes, 29 de junio de 2010

La carnicería. La boucherie. Butcher's shop



Lo que viene a continuación es un texto que pretende exponer una reducción sumamente simplista, falta de matices y de opinión muy subjetiva sobre el lugar que ocupa la mujer en el mundo.


Empiezo:


Mi vida sentimental se caracteriza por haber sido un desastre, en mi haber tengo de todo: relaciones de 3 semanas, de dos meses y de 3 años, lloros a tutiplén, desplantes, caprichos, encuentros con imbéciles y con sumamente imbéciles, momentos de turbolover, pérdida de papeles…en resumen, he sufrido mucho más que no pasármelo bien.


Durante años he creído que existía alguien, tipo hermana mayor que nunca tuve reencarnada en mentor mágico, que sabía la verdad y que tenía un tipo de información que a mi no me había sido revelada por ves a saber qué injusticia cósmica. Venga a buscar, a preguntar, a imitar y claro, a fracasar otra vez.


Hasta que un día que dejé de mirarme el ombligo y se obró el milagro. Al ver el contexto en el que juego mi partida de la vida, me di cuenta que hay de todo, gente que la va medio bien, gente que le va genial y la gran mayoría, gente que no le va bien y que están como yo: algo despistados y sufriendo un poco gratuitamente.


Bien, pues ahí va mi descubrimiento vital ¡a visualizar!


El mundo es un mercado lleno de diferentes puestos. Como en cualquier mercado, hay compradores y producto. Pues bien, el intercambio genético para la supervivencia del ser humano, tiene lugar en una carnicería. Como mujer, has de pensar que tu sitio está en el escaparate, y pensar muy bien qué tipo de carne eres. Para ello hay que valorar qué precio y calidad tiene una y por lo tanto, a que comprador se dirige. ¿eres unas alitas de pollo? ¿eres un pinchito adobado? ¿una hamburguesa de Galicia? ¿o un solomillo de ternera? Piénsalo bien. Según el día y la situación, puedes cambiar de producto, pero no esperes que alguien que sólo compra frankfurts aprecie una carne argentina, y lo más importante, no te vendas por menos de lo que vales. Nunca.


En plan mantra sería: tú eres la carne, ellos los compradores, de ti depende dónde y a cuanto te vendes.


Y en plan vasto: no está hecha la miel para la boca del asno.


Yo me declaro Steak Tartar con días de buey a la piedra.


Epílogo.


Muchos buscan un manual de instrucciones para la vida, muchos más, uno para ligar. Existen, pero no sirven de nada. Hay que experimentarlo por uno mismo.

















Las braguitas del mes "casual"


Estas braguitas son mis preferidas por su tacto, forma y color. Las uso para las tardes con deberes por hacer en casa y mucho calor o domingos con película en la cama.

Son el equivalente de la 'camiseta preferida' de los 15 años: gris, de algodón, sin nada particular aparente pero con la que estás tan a gusto, te sienta perfecta y te sientes muy afín.


Y el mes que viene: Las braguitas del mes "Especial Verano".

domingo, 27 de junio de 2010

El Plan de Depresiones



Últimamente tengo muchas llamadas de amigas que están fatal, más de lo habitual. Creo que es una cuestión de hormonas femeninas, y en mi opinión, de falta de sexo continuado.


Los síntomas generales incluyen: tristeza, mal humor, pensamientos obsesivos (conocidos también como “rayada”), baja autoestima, apatía, alto consumo de nicotina, de carbohidratos, televisión y a veces, de alcohol o tranquilizantes. También suelen incluir a un sujeto masculino que no responde a las expectativas esperadas.


El caso es que ese estado es un asco. Y que no se llega a nada bueno tras 5 horas de televisión, fumando y comiendo. En esos momentos, hay que hacer uso del P. D.


El P.D. o Plan de Depresiones es un producto bancario que todavía no existe, pero que llegará en breve. Funciona como un sistema de ahorro mensual del que se puede hacer uso en caso de urgencia, o sea, de bajón máximo. Se llama al teléfono de emergencia gratuito y se indica domicilio y número de días que se lleva en casa. El Plan se activa inmediatamente.


Paso 1: Desahogo. El Plan llama a dos buenas amigas que estén libres ese día y les envía un prospecto de ayuda inmediata y una caja de kleenex. Van a su casa. Usted llora un rato.


Paso 2: Belleza. Al cabo de 1 hora llaman al timbre de su casa. Es Candela, la mujer de la limpieza de su P.D. No tiene más remedio que salir de casa. Sus amigas la acompañan paseando tranquilamente hasta un centro de belleza integral. Empieza un programa completo de masaje, tratamiento raro para adelgazar, peeling facial, depilación, manicura, pedicura y por último, peluqueria.


Paso 3: Sushiterapia. Antes de salir del centro de belleza le dan un “vestido armonía” diseñado por Donna Karan e insipirado en el Tíbet, es de tejidos naturales y de un corte elegante, favorecedor a la par de cómodo. Amiga 1, Amiga 2 y usted se van guapísimas a comer al Ikkiu. Allí están amiga, 3, 4 y 5. Comerán caprichos, repasarán el código del listón y se reirán.


Paso 4: Desconexión. Después del agotador día, toca película en la filmoteca. Fellini o cualquier oriental harán que reconecte con el arte.


Paso 5: Catarsis. De vuelta a su casa, inmaculada y limpia, como su cabeza lo estará en breve, hace la maleta y se va a ver a amiga 7 que vive lejos de la ciudad. Se levantará con el canto de los pájaros y subirán una mini-montaña cercana. Al llegar a la cima su mente estará despejada.


Existen diferentes modalidades, también las hay de Luxe, pero básicamente incluye siempre amigas, puesta a punto, limpieza del hogar y reconexión con la naturaleza.







jueves, 17 de junio de 2010

Madre rica, Madre pobre.


Hace poco que he empezado a estudiar por las noches, lo hago en una escuela que está al lado de Elisava, un centro carísimo de diseño gráfico en Barcelona.


Como siempre voy en moto, las pocas veces que camino por la ciudad, lo hago con ojos de turista, todo me sorprende y me parece nuevo. Por eso, cuando me crucé en la puerta de la escuela pija con ella me quedé estupefacta. No recordaba ese especímen de mujer: altura media, delgada, pelo lacio largo con una onda al final, color rubio oscuro, piel como de anuncio con horas de photoshop, jerseycito de color pastel con aspecto de algodón al tacto, puños de camisa por fuera, tejanos ajustados blancos, ojos muy grandes, anillos, varias pulseras de tous y móvil en la mano. Mi peor pesadilla cuando era adolescente: la pija de pedralbes.


De los 10 a los 14 años fui con una beca a la escuela más repija de Barcelona. El Abat Oliba. De monjas. Había una tribu extensísima de niñas bien. Me torturaba ser tan distinta a las demás en esos años donde lo único que importa es ser parte del grupo. ¿Por qué? ¿Cómo lo hacen para ser así? Me preguntaba constantemente. Ellas parecían salidas de un anuncio de Tommy Hilgfiger y yo a su lado, parecía de una comuna punk. Estuve bastante sola. Así que pasé años estudiándolas. Ahora, con la edad, puedo decir que es cuestión de dinero. Son una inversión a largo plazo.


Ejemplo:


Borja y Ana María tienen una niña. Piensan un nombre para su retoño que tenga sobretodo “a”’s,. Blanca, Patricia, Laura, Adriana, Sandra, Alba o Clara irá a un colegio de pago, bilingüe y con uniforme. Por las tardes atenderá clases de piano, tenis y ballet. No sé de dónde sacan el tiempo, pero también montará a caballo. Las vacaciones las pasará esquiando, de crucero o de compras.


Aprenderá francés y a contar calorías igual de bien.


La diferencia entre yate y velero antes que el a, b, c.


Protocolo, discreción, manicura, esteticién.


Sus madres lo saben muy bien. Casarlas es el objetivo top-ten.


Si ocurre la desgracia de que la niña nazca gorda o fea, años de intensivo modelado nos darán un recubrimiento aceptable: gorda, pero rica. Fea, pero disimulada, y retocada. Tendrán un halo reconocible y detectable entre ellos. Eso es muy importante. No mezclar castas y perpetuar esa raza superior que controla a los de cuna pobre.



sábado, 5 de junio de 2010

El silencio ¡qué lujo!


Malditos hijos de puta del Ayuntamiento. Porque tienen el poder de condicionar mi vida. Malditos todos.


Ha llegado el verano, y con él las obras de 08h a 18h. Ha llegado el calor también y se hace difícil estar con la ventana cerrada.


La escuela de enfrente ataca los viernes al mediodía con un festival hortera infantil con un reperterio peor que en eurovisión. Lo peor es el tipo con el micro que se supone, anima la tarde. En el primavera sound el sonido estaba por debajo de lo que provoca ese despropósito aniquilador de criterio para chiquillos.


Los mossos me dicen que seguramente tienen permiso. ¿Para hacerlo cada viernes? Insisto yo. Me recomiendan que pregunte el lunes en el ayuntamiento la legislación sobre ruido y que si quiero poner una denuncia vaya a la polícia local. Los maldigo y me prometo que el lunes estaré pidiendo explicaciones en el ayuntamiento a primera hora, aunque en el fondo de mi queja sé que tendré mejores cosas que hacer que ir a perder el tiempo con la administración barcelonesa.


Me voy a dormir el viernes pronto porque estoy cansada del ritmo frenético de la semana.


Una bocina como las que se usan en los partidos del Barça me saca de mi sopor. Por un momento dudo si estoy soñando. No. Los sábados ahora hay partidos de fútbol a partir de las 08h de la mañana.


Abro la persiana y los miro. Ya son mayorcitos para jugar partiditos a esas horas. Son idiotas o ¿qué les pasa? No son horas de estar dando por culo a esa edad. Sigo mirándolos fijamente. Si fuese un superhéroe maligno los habría carbonizado a todos al instante. Maldigo de nuevo por no tener poderes asesinos.


Por fin son las 16h de la tarde. Todo se ha calmado. Yo he perdido la mañana, tengo muchísimo sueño y me juro y me perjuro que me iré a vivir a la montaña, porque mañana domingo, hay basquet.

jueves, 3 de junio de 2010

Grandes Temas Femeninos: El pelo

La dicotomía y el blanco y negro son términos que las féminas entendemos bien.

Si me dicen A, quiero B. Si digo B, en realidad quiero A.

No tengo ni idea de porqué, pero funcionamos así.

Generalizando aún más, puedo decir que nunca estamos contentas con nuestro cuerpo. Siempre hay algo que nos quita el sueño y que nos empeñamos en recordar para no sentirnos las diosas perfectas que parecemos al ojo del escrutador medio masculino.

Y si hay algo entre todos los posibles complejos que cambiaríamos, eso es el pelo. Todas las mujeres del planeta quisieran tener el opuesto de su pelo, pero yo con más motivo.

Tengo el pelo rizado y castaño. Es el pelo ideal si has nacido en los 80 y te dedicas a la música. En el 2010 y siendo urbanita, es un drama. He pasado años alisándome el pelo y envidiando la rutina capilar de mis amigas con pelo de japonesa. Algún día cruzó por mi mente que eran manías, pero no. He hecho un estudio de campo. Hollywood, Lancome y hombres, me dan la razón: el liso mola más.

Y es que, repasemos: ¿qué prota o sex symbol hay con el pelo rizado? ninguna. Después de mucho pensar, sólo me viene a la cabeza Julia Roberts (y siempre que lo lleva rizado es puta o una perdida -en Erin Brockowitz cuando gana el juicio y es rica ya lo lleva liso). Kim Basinger ídem: de guarra rizado, de guapa, liso. Andy McDowell es una sosa y parece la eterna madre, así que no cuenta. Milla Jovovich, Scarlett Johansson, La Rachel de Friends, Liz Hurley, Mónica Bellucci, Sandra Bullock o Naomi Campbell son ejemplos de melenas alisadas día y noche. No les verás asomar ni un rizo.

Hollywood no se equivoca, y eso quiere decir que las mujeres están guapas con el pelo liso y que el rizado sólo es apto para follar.

En cambio a los hombres les pasa lo contrario: el pelo rizado les queda mucho mejor.

Propongo desde aquí un cambio genético que una ondas a cromosomas xy y laciedad en los xx. Que venga de serie, vaya.

Por último, hagan la prueba: pregunten a cualquier mujer, de cualquier nacionalidad y edad cómo le gustaría tener el pelo.

Y prueba dos: ¿cuantas mujeres han querido que tengan el pelo rizado? ¿cuantas con el pelo liso?